Van Gogh pintó cuatro bodegones de girasoles en París a fines del verano de 1887. Hay un boceto al óleo para esta imagen que se encuentra en el Museo Van Gogh de Ámsterdam, así como otra pintura de dos girasoles también firmada y fechada en 1887 en Kunstmuseum Bern, y un lienzo más grande que muestra cuatro cabezas de girasol en el Museo Kröller-Müller, Otterlo.
Paul Gauguin adquirió las dos obras más pequeñas y, hasta mediados de la década de 1890, cuando vendió sus posesiones más preciadas para financiar su viaje por los mares del Sur, ocuparon un lugar privilegiado encima de la cama de su apartamento en París.
Óleo sobre lienzo
1887
43,2 x 61 cm.
Metropolitan Museum of Art, New York