Vincent van Gogh (1853-1890) y Anton Mauve (1838-1888) se conocieron en 1881, cuando Van Gogh se mudó a La Haya para vivir con su hermano Theo, quien trabajaba en una galería de arte. Mauve era cuñado de Theo, ya que estaba casado con su hermana Jet.
Mauve fue un pintor de la escuela de La Haya, que se especializó en paisajes y escenas de la vida rural. En ese momento, era un artista conocido y respetado en los círculos artísticos holandeses, y su estilo influyó en el joven Van Gogh.
Los dos artistas desarrollaron una amistad cercana, y Mauve se convirtió en un mentor y una figura paterna para Van Gogh. Mauve lo alentó en su carrera artística, le dio consejos y le permitió usar su estudio en La Haya para trabajar. Además, también le presentó a otros artistas y críticos, lo que ayudó a Van Gogh a establecerse en el mundo del arte holandés.
Mauve también fue una influencia en la obra de Van Gogh. En sus primeros años, Van Gogh pintó paisajes y escenas rurales, utilizando la técnica realista de Mauve. De hecho, algunas de las pinturas de Van Gogh en esta época son difíciles de distinguir de las de Mauve.
Sin embargo, la relación entre Van Gogh y Mauve se deterioró en 1882. Mauve no aprobaba las elecciones amorosas de Van Gogh y le recomendó que dejara a su novia, lo que Van Gogh encontró inaceptable. Además, Van Gogh también se sintió frustrado por la falta de éxito en su carrera artística y la dificultad para vender sus pinturas. Los desacuerdos finalmente llevaron a una pelea, y los dos se separaron.
A pesar de su corta duración, la amistad entre Van Gogh y Mauve fue significativa en la vida del joven artista. Mauve lo introdujo en el mundo del arte holandés y lo alentó en sus primeros años como pintor. Además, la influencia de Mauve en la obra de Van Gogh se puede ver en las pinturas de paisajes y escenas rurales que Van Gogh creó en su juventud.